«Se puede estudiar y jugar al básquet»
Sebastián Vega está viviendo un momento muy especial, tanto en lo profesional como en lo personal. En lo basquetbolístico, el alero concretó el regreso a un Quimsa se que armó para pelear en lo más alto, mientras que en su vida cotidiana, el ex Libertad dio un ejemplo de dedicación: el domingo pasado se recibió como Técnico en Relaciones Laborales. Para conocer algo más sobre esa historia, hablamos con el egresado Vega.
– ¿Cómo se dio esto de complementar el básquet con el estudio?
. Creo que siempre tuve ganas de estudiar y a veces se complicaba por el tema de los tiempos. Pero con los avances tecnológicos y las capacitaciones que hay, tenés muchas formas de estudiar a distancia. La verdad que está buenísimo, porque no solamente me ayuda para el futuro, sino que me ayuda para el presente, en el sentido de aprender cosas cotidianas que nosotros no estamos acostumbrados a manejar. Y también para despejarme. La temporada es muy larga y me ayudó a no estar pensando solamente en básquet, sino también tener la cabeza en otras cosas. Por ahí eso también llevó a que mi rendimiento profesional aumente, porque al relajar la cabeza, se disfruta mucho más ir a la cancha.
– ¿Por qué elegiste relaciones laborales?
. Yo en principio había empezado como contador, y la verdad que era muy largo. Entonces preferí empezar por algo más corto y donde viera el objetivo más cerca, para motivarme. Si eran cinco o seis años, parecía que no llegaba nunca. Opte por algo más sencillo y tranquilo. Relaciones laborales fue una de las carreras que más me gustó. Quizá no sabía mucho de qué se trataba, pero cuando empecé a manejarlo fue un tema que me gustó muchísimo. Te ayuda mucho en el ámbito laboral y bueno, me copé y ahora me gustaría seguir estudiando algo más relacionado a lo deportivo, donde obviamente uno ya conoce bastante del ambiente.
– ¿Cómo te surgió esta inquietud de querer seguir una carrera?
. Me acuerdo que cuando terminé la secundaria empecé, tenía 19 o 20 años cuando me fui a Peñarol. Fue todo muy nuevo. Yo estaba con mi familia y de repente pasé a estar solo. Después surgió el tema de la selección. Como que se me complicó con los tiempos. Cuando es chico está como más distraído también. Pero cuando maduré me di cuenta que tiempo había, que tenía ganas y esa inquietud de estudiar, porque la vida del deportista es corta y no todos somos Ginóbili o Scola. Hay que aprovechar esa oportunidad que te da el básquet para tener un buen presente y también para el día de mañana abrir posibilidades para tener capacidades a la hora de trabajar. Cuando nos retiramos somos jóvenes para la vida y hay que seguir trabajando en algo. Entonces es fundamental. Me pareció importante. Lo hablé con mis padres y hoy están súper orgullosos porque soy el primero de la familia en tener un título. Después en Santiago también, tenía una pareja amiga que ella es profesora y siempre me decía: vos tenés mucha capacidad, sos muy esquematizado, responsable. Yo tenía dudas por si no me iba bien, pero un día ella me dijo que el saber no ocupa espacio y que si no terminaba, al menos iba aprendiendo cosas. Así que me dio el puntapié, ahí arranqué. A partir de ahí me entusiasmé cada vez más y el domingo obtuve el título. La verdad que la felicidad es enorme.
– ¿El curso lo diste siempre online?
. Sí, online. Me recibí en la Siglo 21. Al principio, con la de contador, era semi a distancia y todos los martes tenía que ir. Cuando empecé a estudiar hace un par de añitos, la Liga se jugaba viernes y domingos, entonces ahí podía ir todos los martes. Trataba de arreglar el tema de las prácticas e iba. Pero después cuando me anoté en esta carrera nueva, se podía hacer totalmente a distancia. Solamente en los parciales y en los finales tenías que anotarte e ir en los días que podías. Cabe rescatar que son posibilidades que a uno le dan. En Santiago, en Buenos Aires y en Sunchales, siempre tuve la oportunidad de hablar con los tutores de las universidades y rompía un poco las bolas cambiando algunos horarios. Eso quiere agradecerlo porque me tocaron tutores excelentes. Siempre me ayudaron e hicieron todo lo posible para llegar al objetivo.
– Volviendo al tema del estudio. Si tuvieras que hacerle alguna sugerencia a algún chico que está en la duda sobre combinarlo con la carrera deportiva. ¿Qué le dirías?
. Le diría que estudien, que es lo más importante. Es una herramienta para el futuro y para el presente. Se pueden hacer las dos cosas al mismo tiempo. Obviamente que hay que dejar de hacer cosas de ocio. Tengo una anécdota con Pablo Barrios, que llegamos de un viaje un domingo a la mañana y yo me fui todo un domingo a estudiar. Uno tiene situaciones que van surgiendo, pero lo importante es hacerlo con ganas y ser perseverante. Se puede, nada es imposible. Hay que estar enfocado en el objetivo.
Nota: Juan Martín Orellano de BasquetPlus